Otoño en el agua, foto por Obed Arango, Stony Creek, 4 de octubre del 2009, Blue Bell, Pa.
Mi alma está en el arroyo,
en el que la luz quiebra
y salpica mil luces y canciones,
sonidos de grillos y sapos,
luces brillantes y alternantes
de luciérnagas azules y rojas.
Espacio de silencio,
espacio de pensamiento y reflexión
espacio que me lleva aveces a Santa Cecilia,
espacio mío y propio en la tierra lejana.
Tierra lejana que me ha apartado
un pedacito de agua,
un pedazo de cielo reflejado
en las piedras que sin moverse cambian.
Y así como las estaciones pasan,
mi vida transcurre reflejada,
en el fondo de un arroyo que mira mi lente.
Y en el observo la vida que pasa,
con él platico y me escucha,
en él mis lagrimas se han vertido,
la risa ha hecho eco,
y han corrido estación tras estación
a mi tierra querida.
Pero es en este arroyo
en el que la nueva tierra
toma sentido,
en el que me alimento de frescura
y en el que las ideas y los pensamientos
se elevan al mirar al agua hacia abajo y...
tocan el cielo,
tocan el cielo,
sí tocan el cielo...
Obed Arango
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